Por Shalim Saa
La prudencia es el termómetro de piedra tope que nos indica hasta donde intervenir en ciertas situaciones ya sea para mal y con ello largarnos ó para bien y así continuar en aquella acción, ahora bien, de acuerdo a la definición señalada si fuéramos prudentes ¿Chile habría pasado tantos desaciertos que en muchos casos no ameritaban que ocurriesen?, mi respuesta anticipada es... ¡claro que no!

Claro está que un individuo o un colectivo que no tienen identidad difícilmente podrán encontrar la victoria al no conseguir descubrir previamente el camino para tan anhelado triunfo.
La definición de identidad como individuo o como colectivo nos da un patrón de cómo comportarnos y al mismo tiempo saber que queremos conseguir con ese comportamiento.
Lamentablemente Chile en este momento no quiere conseguir nada, porque nada es. Bajo esa misma vía avanzamos dominados por materialismo de distintas cunas que tienen como objetivos nada mas que despojarnos de todo ser, de todo actuar natural, unos por considerar que no somos más que materia, otros por reducir la vida sólo a una transacción de cambio de tipo monetario, dentro de esta sintaxis no es de sorprendente que al alero de la globalización bestial muchos de nuestra población y jóvenes especialmente adquieran modas foráneas sin importarles si aquellas tuvieron en forma incipiente alguna connotación positiva o negativa en el pasado real a la cual fueron elaboradas, pasando a tomar forma cualquier fin primero, rezagando lo nuestro a solo una banalización, la entretención dirían algunos es el motivo de todo aquello, la distracción dirían otros, y yo les digo, el actuar no creen que marca la diferencia entre los primates y los seres humanos o tendremos que pasar más años de nebulosa etérea de nuestra esencia del comportamiento para que entendamos qué somos.
El problema no es copiar, el problema es copiar sin haber entendido previamente quiénes somos, dejando aún mas aplastado en el letargo a nuestro pueblo y confundidos en el olvido. Dentro de este mismo pensamiento países desarrollados tuvieron la dicha de desarrollarse étnica y culturalmente de la mano a partir de sus mismos orígenes, vemos como lo es Francia, Alemania, Inglaterra, y el mismo EEUU, eso no me cabe duda que influyo de manera proporcional en el desarrollo de sus mismos pueblos, porque “SABEN LO QUE QUERIAN, SABEN LO QUE QUIEREN Y SABEN LO QUE QUERRÁN.”
La tónica de nuestro país dicho todo lo anterior es que no existe prudencia al no haber un moldeamiento en el actuar cultural, sabemos poco o nada, como dice el chileno “si la estamos haciendo de oro o la estamos cagando”, creo que en la política, la diplomacia, los centros comunitarios y, sociales en general se ven reflejados con tanta putrefacta decadencia, que engloba a todos sin dejar a nadie ajeno de ello.
Pero creo que en este mundo no hay nada que no tenga solución, y esta precisamente en raizarnos en nuestros orígenes, en la patria que nos vio nacer, en nuestros suelo, en el origen del pueblo que plasmo los primeros atisbos de cambio en nuestro entorno natural, y esa respuesta no la podemos encontrar en otra parte que no sean nuestros pueblos originarios, son ellos, y solo ellos los que darán el punta pie inicial de darnos una explicación de esencia del ser Chileno.
No hay comentarios:
Publicar un comentario